sábado, 4 de diciembre de 2010

Doy el significado que quiero dar

Esta tarde parecía que todo iba bien: Las 18:30h, mucho frío pero sin lluvia y Rafa preparado para acompañarnos a realizar el entrenamiento pactado para hoy.
Sin embargo, unos minutos antes de comenzar, mi entrenador me dice que quizás tenga que salir sin él pues siente un dolor bastante intenso en uno de sus gemelos. !No me lo puedo creer!, dije. Pero !si tú no te lesionas nunca!, la "pupas" siempre he sido yo.
Cuando no me duele el tendón de aquiles, me tiran los isquiotibiales y si no se me cargan los biceps femorales, o cualquiera de los cientos de músculos que existen en nuestro cuerpo.
Pues no, estaba vez iba en serio y comenzó a darme las oportunas instrucciones para que tuviera las referencias adecuadas, al menos para tomar conciencia clara a cerca de la distancia que tendría que recorrer. Lo del ritmo ya sería otro cantar.
Unos minutos quedé un tanto noqueada por notar que salía irremediablemente de lo que llaman la zona de confort, y darme cuenta que mis expectativas entorno a lo que sería el entrenamiento de hoy iban a sufrir un vuelco importante.
En esos momentos el universo; siempre el universo, me hizo recordar un artículo que había publicado Iberia y que tenía recogido en su página web.
El tiempo que tardé en localizarlo fue suficiente para que el entrenador cambiara de opinión y decidiera, aun a sabiendas que no debía hacerlo, marcar nuestro ritmo de carrera para asegurar el cumplimiento del plan.
Yo le insistí en que no era necesario. Que intentaría aproximarme lo más posible a los ritmos que me había propuesto y que sería mejor que dejara su gemelo descansar.
Me comentó que probaría unos kms y si veía que sentía dolor, volvería para casa mientras nosotras terminábamos sin su compañía.
Aunque nos tocó mojarnos durante los últimos 4km, yo me encontré realmente genial, sin sentir sufrimiento en ningún momento. 3km de calentamiento más 8km a 4:40min/km más vuelta a casa 2km lentitos.
Rafa tampoco notó demasiado dolor en cuanto calentó sus músculos.

Ahora mismo mientras escribo esto se acaba de asomar cojeando buscando hielo pues siente un dolor bastante intenso en su pierna. !!Espero que se le pase para el Domingo que nos toca el largo!!. Mañana será día de descanso. Está claro que lo necesitamos.


Factores determinantes Por Iberia González.
Publicado en www.caminoabierto.net



Cada ser humano transita por caminos diferentes en la vida tratando de alcanzar pequeñas metas o grandes objetivos. Algunos lo consiguen mientras otros no... ¿Cuáles son los factores que determinan esto? ¿Qué hace que algunas personas sean exitosas y tengan una vida llena de logros?

¿Qué es lo que nos acerca o aleja de materializar nuestros anhelos? Las respuestas más frecuentes que damos, responsabilizan al tiempo y/o dinero, aunque también esta el gobierno, el país, la empresa, el jefe, los vecinos, la pareja, los padres, los hijos… es decir, lo que pensamos que determina nuestro éxito son las circunstancias. Factores externos a nosotros que si bien es cierto existen, NO son determinantes.

Pero, si las circunstancias no son determinantes ¿qué sí lo es?

A cada instante hacemos tres elecciones: la primera es el Foco, ¿donde voy a centrar mi atención? Una vez que encontramos el foco le asignamos un Sentido, ¿qué significado tiene en lo que me estoy centrando?, y el resultado de esas dos primeras elecciones nos lleva a la tercera que es la Emoción, ¿qué sentimiento obtengo del sentido que le estoy asignando al foco en el que me estoy centrando?

Estas tres elecciones son por lo general inconscientes y automáticas. La mayoría de nosotros hemos heredado la manera de darle sentido a las cosas del entorno en el que nacimos. En general vivimos sobre creencias que nunca hemos escogido de manera consciente y nos movemos en una dirección que desconocemos.

Confundimos nuestras creencias con nuestra identidad y pensamos que éstas son inherentes a nosotros.

Pongamos un ejemplo de estas tres elecciones: un día vamos al doctor y nos enteramos que estamos muy enfermos, supongamos que nos dicen que tenemos cáncer. Es un Foco importante en el que centramos nuestra atención. Siguiente elección ¿qué Sentido le damos?, ¿es una derrota?, o ¿es una oportunidad? Dependiendo del Significado que le otorguemos vendrá inmediatamente la Emoción que vivamos: nos hundimos en una profunda depresión o llevamos nuestra vida a un nivel que jamás pensamos seríamos capaces. Lance Armstrong hizo esto último. Después de enterarse que su cáncer en los testículos estaba en fase de metástasis y se había extendió al cerebro y a los pulmones, gano siete veces consecutivas el Tour de Francia 1999-2005. He escuchado decir a Lance Armstrong que el cáncer es lo mejor que le pudo ocurrir en la vida. A partir de sus circunstancias hizo sus tres elecciones y ahora su fundación “livestrong” (Vive con fuerza) apoya a miles de personas afectadas por el cáncer a que su Foco sea Vivir, les recuerdan que no están solos y que pueden elegir que sentido darle a la vida.

Viktor Frankl (Viena 1905-1997) decía que es posible que no podamos controlar lo que nos ocurre, pero tenemos la libertad de darle el significado que queramos. Esto lo dijo después de haber vivido en cuatro campos de concentración en Alemania de 1942 a 1945, en donde mueren sus padres, su hermano y su esposa.

A partir del sentido que le otorguemos a los eventos en nuestra vida aparecererá, o no, aquello que determinará nuestro éxito.

Nuestra Creatividad, Decisión, Amor, Pasión, Entusiasmo, Compromiso son Factores Determinantes. Valores que existen en todos y cada uno de los seres humanos en mayor o menor medida. Valores que se pueden ejercitar y desarrollar igual que se desarrollan los músculos y la condición en un entrenamiento físico, solo que en este último caso se adquiere una buena condición intelectual y emocional. Condición que nos permite alcanzar nuestras metas y contribuir a que otros alcancen las suyas.

Como decía Clement Stone: “la mente puede conseguir aquello que puede concebir”, entonces, tanto si creemos que podemos, como si creemos que no podemos, ¡tenemos razón!


1 comentario:

rafidrum dijo...

vale, vale, pero los kilómetros fueron a 4:30, no a 4:40, no nos quitemos mérito.