miércoles, 1 de diciembre de 2010

Sin piernas ni brazos

Hoy no ha habido forma de encontrar un momento adecuado para poder hacer el entrenamiento. La forma de llover ha sido como si estuvieran tirando calderos de agua sin parar durante todo el día. Como aun no habíamos hecho ninguna jornada de descanso esta semana, decidimos que la elección estaba clara; hoy asimilación de lo realizado. Mañana ya no habrá excusas.

No hay comentarios: